Caroline Berriman, una profesora inglesa de treinta años, tuvo una relación enfermiza con uno de sus alumnos en un colegio de Manchester. La víctima, de 15 años, confesó que la mujer lo contactó por Facebook, tuvieron frecuentes encuentros sexuales y hasta la pequeña hija de la maestra lo llamó “papá”.
El adolescente dijo haber tenido por lo menos cincuenta relaciones íntimas con Berriman en dos meses. La profesora era una de las asistentes del colegio Abraham Moss Community School.
La mujer lo ubicó en Facebook y le pidió el número de su celular. A partir de ese momento intercambiaron mensajes de texto y llamadas, que se volvieron cada vez más privados.
"Nos enviábamos mensajes y llamábamos todo el tiempo, se volvió un tipo de relación cada vez más y más seria. Después, me llamaba los fines de semana y me pedía que las pasara a buscar. Lentamente se volvió más serio, hasta el punto de que su hija me llamó 'papá'. Le solía decir: 'No soy tu papá, soy amigo de tu mamá'", expresó el joven al medio británico "The Sun".
Berriman, asustada por si pensaba dejarla, le hizo creer al adolescente que estaba embarazada y que le podía romper el corazón a su hija al alejarse de ella.
El pequeño le habló de su relación a su hermano, quien alertó a sus padres. Aseguró sentirse impactado por el grado de dependencia sexual que la maestra tenía de él.
La asistente fue separada de la institución educativa y denunciada inmediatamente. Sin embargo, fue puesta en libertad por las autoridades y tendrá que cumplir 250 horas de trabajo comunitario. La víctima calificó la pena que impuso la Corte de Manchester como “atroz”.
Fuente: El Comercio
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